“ J. DU PRÉ... LA SUFRIDA SONRISA DE LOS GENIOS ”

Veréis me he dado cuenta, queramos o no reconocerlo, que todos tenemos nuestra religión, nuestro credo y nuestro flautista de Hamelin... hasta los ateos. Y después de meditar... más o menos... medio segundo:)) me he dado cuenta, que mi religión es la música. Si pensabais que me iba a ir por otros derroteros, no. Dejo la vena mística para otro día... jaja hoy... me voy a lo mío, a lo que más me gusta en esta vida, la música.

Precisamente porque me encanta, en estas fechas siempre me regalan música en diversos formatos... para escuchar, para ver o para leer... porque la música, se disfruta de mil maneras... a veces creo que hasta se podría tocar, si el cerebro tuviera dedos o masticar si tuviera boca, porque la música, se escucha de verdad con el cerebro, no con los oídos.

Todo este preámbulo para hablaros de algo muy curioso que me trajeron los Reyes... por cierto, otro año que me paso la noche acurrucada tras el árbol a ver si los pillo y... nada:-) Fue un libro, dentro del cual había fotocopiado un artículo...ambos escritos por el médico internista Pedro Gargantilla del Hospital Clínico San Carlos de Madrid. El libro es de historia, que también me encanta, se titula “Enfermedades de los reyes de España: Los Austrias” aunque lo que realmente me gustó, fue el artículo que me habían metido dentro ( qué bien me conocen algun@s ;-) Y aunque no se si os lo recomendaría, porque para profanos en medicina como yo, su lectura resulta un poco farragosa, por lo impronunciable de algunos nombres científicos, me pareció de lo más curioso.

Os estaréis preguntando que pinta un médico, hablando de música... pues veréis, este hombre se dedicó a estudiar las posibles dolencias padecidas por determinados maestros de la música y su repercusión en la composición e interpretación de alguna de sus obras.

Es sabido que la genialidad,

casi siempre va unida a terribles sufrimientos,

quizá en pintura esta faceta es más conocida,

el atormentado y genial Van Gogh, el mejor ejemplo.

Bien, muchos de los genios de la música,

también han sufrido lo indecible...

Fran Listz (1811-1816)

Incesante y mágico pianista, sufrió una terrible rizartrosis que le obligó en los últimos años de su vida a componer piezas, que no le exigieran una apertura extrema de la mano.

Robert Schumann (1810-1859)

Padeció de todo, el pobre...conocido como el “poeta del piano” quedó afectado por una luxación de dedo y su anquilosamiento. Se torturaba con un artilugio de madera, con el que hacía estiramientos terriblemente dolorosos. Pero sus padecimientos, no terminaron aquí, alternó depresiones endógenas con hiperactividad, para fallecer recluido en un centro de salud mental.

Ludwig van Beethoven (1770-1827)

Si alguien escuchó la música con el cerebro, fue él, el músico sordo más famosos de la historia. En opinión del autor de este libro, por su afectación de los tonos altos, con tinnitus e hipersensibilidad para los ruidos, se sospecha que padeciera una sordera neurosensorial. Sumado a trastornos abdominales de tipo cólico, con fiebre. En la autopsia se le detectaron además, una cirrosis macronodular, colelitiasis y pancreatitis crónica...Lo que hace que me pregunte ¿Cómo un hombre que en realidad estaba hecho un asco, sordo de oído además, pero no de corazón, fue capaz de plasmar tantísima belleza en su obra?

Y así, os podría hablar de las cataratas de Johann Sebastian Bach, el eritema nodoso asociado a una infección estreptocócica de Mozart, o el sínfrome de Ehlers-Danlos, que padeció el genial violinista, Niccollo Paganini. Oxímoron de la vida... explosión inmensa de sentimientos hermosos.. en forma de notas... que nacen del sufrimiento.

No puedo terminar esto (lo sé, estoy abusando como siempre de vuestra paciencia:-) sin mencionaros uno de los casos más tristes, dolorosos y a la vez mágicos de la historia de la música. El de la genial violonchelista Jacqueline du Pré. Aquejada de esclerosis múltiple en la cúspide de su carrera, diagnosticada a los 28 años, falleció con tan solo 42 años. No se me ocurre ningún padecimiento más terrible para cualquier persona, que perder poco a poco la movilidad del cuerpo. Si además de para vivir, con el cuerpo se crea y siente mágicamente la música, como ella lo hacía... sólo se me ocurre un nombre, tortura.

Lo más curioso, admirable y verdaderamente mágico de su historia, es que hasta su muerte, quienes la conocieron de verdad, la llamaban cariñosamente “Smiling” (sonriendo )... ¿No os hace pensar?... a mi, sí.

Os dejo con ella.

Entenderéis mejor de lo que os hablo.

Seguramente esta, no será su mejor interpretación,

pero que a mi, me...¡¡ encaaaanta !!

( Un poquito de paciencia con el video, merece la pena )

Como vivimos en un mundo muy miserable,

al que le encanta derribar mitos...

En 1988 apareció una película supuestamente biográfica de Jacqueline, “Hílary y Jackie” instigada por su hermana, un ser comido por los celos, enferma de envidia por un éxito que jamás tuvo, donde se la dibuja como un ser débil, de naturaleza depresiva, manipuladora e instintos suicidas y perversos.

El 20 de enero de 1.999 se publicó una carta en THE TIMES...

Co-firmada por algunos de los más grandísimo directores y músicos de este siglo ...Yehudi Menuhin , Itzhak Perlman , William Pleeth , Rostropovich, Pinchas Zukerman y Lloyd Webber en reacción a la película, que decía:

"Esta no es el Jacqueline du Pré que nosotros, como sus amigos y colegas , conocimos. Jacqueline poseía una alegría maravillosa de hacer música y de vivir, una capacidad única de llevar alegría a su público. Esta es el Jacqueline du Pre que recordamos " y...

Julian LLoyd Weeer ( chelista ),

compuso esto en su memoria:

Se titula “ Jackie´s song”

Después de todo esto...

¿ Alguien se atreve a quejarse de penas o dolores ?

Yo, desde luego no.

Un beso