Miércoles de ceniza, fin del carnaval. El miércoles pasado falleció la madre de una persona a la que quiero muchísimo. Una bloguera, mi MARINA. El viernes hubiera ido encantada a su entierro si no fuera porque además de trabajar debía viajar durante más de 11 horas ida y vuelta. Sabe que de corazón estuve. Estuve sin estar. Sé que su madre se fue suave, sin sufrimiento, una al lado de la otra. Firmaría ya mismo por poder vivir algo así cuando le llegue la hora a la mía. Cuando se fue mi padre tardé más de dos años en reaccionar. Hacía tres días que había hablado con él, todo perfecto. La última vez que le vi ( quince días antes) estuvimos cantando hasta las tantas. Como si me hubieran volado la cabeza el instante que escuché -estaba a casi 300 km de él- que había muerto.
Los recuerdos y las cenizas se expanden con el viento. Fuera nos despeluja enmarañándonos el cabello, dentro lo mismo. Siento que esto va a ser una maraña de pensamientos despelujados en letras, lo veo venir :))
El sábado, me avisaron de otra muerte. Una mujer entrañable. Además de amiga, una de mis primeras clientas. Me gustaba escucharla llamarme “neniña”. Nunca le agradeceré bastante su confianza en mi recién estrenada en este oficio, cuando no tienes ni idea y sientes más miedo tú que nadie. Después vivimos juntas muchas aventuras en los juzgados (aunque sigo con miedo y sin idea:-)
En Galicia se pleitea sobre todo por dos asuntos, por un palmo de tierra y alucinantemente, con lo que nos cae desde que se rompió el cielo, por el agua. ¡Qué sería de los gallegos viviendo en el desierto! a veces me lo pregunto.
Maru -se llamaba así- tenía muchísimas fincas. Recuerdo que me decía “neniña, la tierra es para los pleitos, como un abrigo sin airear para las polillas”, es cierto. La cantidad de propiedades que acumulamos es directamente proporcional a los conflictos y problemas que sufrimos. No es por consolar a los que nada tienen, es la verdad verdadera. Sin embargo, todos llevamos un pequeño tío Gilito dentro ( algunos enorme) y así nos va.
Maru -se llamaba así- tenía muchísimas fincas. Recuerdo que me decía “neniña, la tierra es para los pleitos, como un abrigo sin airear para las polillas”, es cierto. La cantidad de propiedades que acumulamos es directamente proporcional a los conflictos y problemas que sufrimos. No es por consolar a los que nada tienen, es la verdad verdadera. Sin embargo, todos llevamos un pequeño tío Gilito dentro ( algunos enorme) y así nos va.
El domingo fui a su entierro. Salvo de personas muy cercanas y queridas jamás voy a ninguno. Me gustan tan poco como los carnavales. Les encuentro mucho parecido. Cambia el color de los disfraces, el sonido que se escucha y el motivo, a veces ni eso.
No me preocupa lo más mínimo la muerte, solo el dolor hasta que llega. Lo que no soporto son los adioses. A la gente que quiero jamás le digo adiós, me es imposible. Sin embargo mataría por haber podido besar a mi padre antes de irse.
Ella tenía 80 años, soltera, solo familia colateral o lejana, supuse de las que van vestidas de compungido domingo enlutado fuera, mientras frotan sus manos dentro. Más que nada me apetecía decirle bajito "gracias Maru" y acompañarla en su encuentro con su querida tierra, esa por la que tanto había luchado.
Ella tenía 80 años, soltera, solo familia colateral o lejana, supuse de las que van vestidas de compungido domingo enlutado fuera, mientras frotan sus manos dentro. Más que nada me apetecía decirle bajito "gracias Maru" y acompañarla en su encuentro con su querida tierra, esa por la que tanto había luchado.
El único entierro que fui sin saber si quiera que estaba, fue al de mi padre. Recuerdo que ese día me preguntaba por qué narices me arrastraban a llorar delante de la gente. Soy muy llorona, no puedo evitarlo, pero no soporto que nadie me vea. Recuerdo ese día como una verdadera tortura. Ya es bastante duro sentir que se te cae el alma a cachos, para además tener que pasearte arrastrando lo poco que queda de ti delante de gente que te mira y ni siquiera ves. Lo más terrible del mundo para mi.
Pero cada uno somos como somos. Jamás olvidaré a mi madre ese día. Diré por delante para que os hagáis una idea que es nervio en estado puro, una mariagonías y si yo soy llorona ella, chorrea agua por los ojos. Eso sí, cuando se pone, nadie más divertida que ella. Además, la mujer más enamorada y devota de su marido que he conocido jamás. Pues bien, el día del entierro de mi padre era una extraña mezcla de paz y orgullo exultante. La miraba y no lo podía creer. Entera, serena, ni una lágrima en su rostro. Si no supiera que lo adoraba diría que hasta feliz.
Al terminar la misa del entierro, unos minutos antes de levantar el féretro, se levantó. La iglesia atiborrada, el sacerdote aun arriba en el púlpito, todos sentados y de pronto, ante nuestro asombro...ella allí de pie. Se giró, dando la espalda al sacerdote, mirando a todos de frente, como hablando a unos amigos frente a un café. Absolutamente tranquila dijo:
- Quiero daros las gracias a todos en nombre de Paco.
Sé que él se siente tan agradecido y orgulloso como yo de veros a aquí.
Se volvió a girar y se sentó en medio de un silencio tan inmenso que paralizó el aire. Mi cerebro sintió eso. Es lo único que recuerdo de aquel entierro. Nada más. Todo lo demás está mojado.
Después ha contado mil veces que cuando subían a hombros el féretro de mi padre en medio de toda aquella gente, lo veía como un torero saliendo por la puerta grande. Es curioso cómo somos ¿verdad? viviendo lo mismo, ella levitaba mientras yo solo deseaba desaparecer. Ahora sé que fue así, entonces pensé que estaba tan conmocionada que había chiflado completamente. Un poquito sí que lo está, es mi chiflada adorable. Debe ser la única mujer en el mundo que hace una fiesta el aniversario de la muerte de su amor. No una reunión familiar íntima, no. Eso a ella no le vale. Literalmente una fiesta. Jamás bajamos de 30 personas desde hace 10 años ese día. Así salí yo, con semejante madre que se puede esperar:))
Al terminar la misa del entierro, unos minutos antes de levantar el féretro, se levantó. La iglesia atiborrada, el sacerdote aun arriba en el púlpito, todos sentados y de pronto, ante nuestro asombro...ella allí de pie. Se giró, dando la espalda al sacerdote, mirando a todos de frente, como hablando a unos amigos frente a un café. Absolutamente tranquila dijo:
- Quiero daros las gracias a todos en nombre de Paco.
Sé que él se siente tan agradecido y orgulloso como yo de veros a aquí.
Se volvió a girar y se sentó en medio de un silencio tan inmenso que paralizó el aire. Mi cerebro sintió eso. Es lo único que recuerdo de aquel entierro. Nada más. Todo lo demás está mojado.
Después ha contado mil veces que cuando subían a hombros el féretro de mi padre en medio de toda aquella gente, lo veía como un torero saliendo por la puerta grande. Es curioso cómo somos ¿verdad? viviendo lo mismo, ella levitaba mientras yo solo deseaba desaparecer. Ahora sé que fue así, entonces pensé que estaba tan conmocionada que había chiflado completamente. Un poquito sí que lo está, es mi chiflada adorable. Debe ser la única mujer en el mundo que hace una fiesta el aniversario de la muerte de su amor. No una reunión familiar íntima, no. Eso a ella no le vale. Literalmente una fiesta. Jamás bajamos de 30 personas desde hace 10 años ese día. Así salí yo, con semejante madre que se puede esperar:))
Creo que lo dejo aquí. Se me ha ido totalmente la cabeza. Solo una cosa más. Un beso enorme a la madre de Marina, a mi amiga Maru y sobre todo... a mi padre.
A vosotros,
si habéis soportado esto,
mi infinita gratitud y cariño.
Un beso
Mi dulce AMY.. Pocas personas llegan a aceptar la muerte como un proceso natural y normal en la vida ( sin temor ! ).. y aquellas que lo consiguen, probablemente tengan una vida más feliz. .Y mucha FE !. .. No es mi caso , pues la muerte es un escalón desconocido en nuestra existencia y sólo aquellos que como yo, hallan pasado por tal experiencia ( la perdida a muy temprana de mi hermano, super - joven y luego mis padres en tan corto tiempo : no puedo asimilarla..!!!!. Hoy en día y desde mi experiencia personal , al cabo del tiempo .. elaborando el famoso " duelo ", ese sentimiento que acompaña a la muerte , no me es confortable, no justifica la perdida de mis mas , seres amados. Como a muchos y respetuosamente lo expreso .. para algunos es confortable.
ResponderEliminarUnas horas antes de iniciar este escrito vi la película "Más allá de los sueños"; en ella, la protagonista refiere la muerte como algo que no puede ser malo porque por algo todos vamos a parar al mismo sitio. A que sitio ?????. Es para ellos , así de sencillo pero la incertidumbre del cuándo y el cómo por no decir el temor al qué pasará después, hace que la mayoría de los humanos incorpore un sentimiento de miedo al referirse a ella.
LOGICO !! , pero poco racional, al menos para mi..
Besossss enormessss, para mi Amiga Maria..
Besos de Oso, abrazadores, tiernos y cálidos .
EMY cielo, lo desconocido nunca es confortable, como mínimo genera incertidumbre, si no miedo. Aun aceptando la muerte como algo natural, que lo es, es inevitable que asuste. Yo he dicho que no me preocupa, la mía nada, la de los míos mucho. Aunque ya te contaré cuando se me acerque si no me muero de miedo... antes de morirme:-)
EliminarTe diré para que veas lo que es la vida, a pesar de lo que cuento en la entrada de la reacción que tuvo mi madre ese día, respecto de la mi padre -con sus momentos- siempre lo ha llevado con una entereza envidiable, asombrosa casi te diría. Mi madre y mi padre jamás en su vida estuvieron separados, ni un solo día, nunca y ya ves. A pesar de todo esto, te aseguro que mi madre se muere de miedo, no ya con la muerte, con todo. Si te retrasas cinco minutos en llamar cuando estas de viaje, su mente galopa y siempre se imagina mil desgracias, jamás nada normal, por eso digo que es maría-agonas. Lo es con todo, por insignificante que sea para ella es un mundo y repito EMY, yo estaba echa un asco, lo estuve durante mucho tiempo y ella... firme como una vela. Sin embargo ella se muere por mil cosas que a mi me hacen reír. Los humanos somos así. No creo que importe que hayas visto de lejos o de cerca la muerte. Verás, mi padre perdió a su padre con tres años -le mataron- perdió a sus dos únicos hermanos por el cáncer, él mismo murió de cáncer y nunca le vi especialmente preocupado por ella. Estaba tan poco preocupado, que no le dio tiempo a avisar a nadie cuando la tuvo encima. Lo digo en la entrada, cada uno vive lo mismo diferente, a su manera, es así. No hay explicación a lo que cada uno siente, ni frente a la muerte, ni frente a casi nada.
No obstante, todo se vive diferente también según como te pille. Física y emocionalmente. No es lo mismo un golpe si te pilla fresco como una lechuga que currado y dolorido, cuando llueve sobre mojado todo es mucho más duro. Creo cielo, que es lo que te ha venido ocurriendo a ti, por eso te comprendo muy bien. Sin reponerte de un golpe te ha llegado otro y otro más, eso no hay humano que lo resista, así que solo puedo desearte todo el ánimo y fuerza que necesites para seguir aguantando, luchando y con el tiempo puedas sobreponerte a todo lo que te duela.
Un beso inmeeeeeeeeenso mi querida EMY, mil gracias por pasarte.
Eres muy fuerte, podrás... estoy segura preciosa. Tooodo mi cariño.
A donde nos vamos? A que sitio? Pués nos vamos adonde venimos, que mejor lugar que volver a formar parte del universo. Triste para los que nos quedamos, pero con la felicidad de que algún día nos encontraremos de nuevo.
EliminarUn besooo grande para tí también, la tierra siempre se queda aquí y al final es la que nos tapa de un modo u otro.
ResponderEliminarBesines utópicos, Irma.-
Tienes mucha razón IRMA, la tierra está cuando llegamos y permanece cuando nos vamos. Nos cuida vivos y no tapa muertos y ya ves, nosotros le pagamos tratándola a baquetazos. Menudos hijos estamos hechos, nos debería dar una buena zurra y ya ves, salvo estos cabreos que se pilla con el mar o el agua o cuando le entran los temblores eso que deben ser de puro hartazgo, una santa, ahí aguanta carros y carretas:))
EliminarMil gracias y otro beso aun más grande para ti, mi querida cazurrita :))
¡¡ BUENAS NOCHES A LAS DOS Y A TODOS !!
Hoy sólo te abrazo, que estoy muy moñas y me pongo a llorar.
ResponderEliminarUn besazo cielo azul.
Jo! NURIA, no me digas esto,
Eliminarlo que te faltaba, que ahora estas letras te hagan llorar también... lo siento de verdad.
Un beso inmenso bonita ( en un minuto que vuelvo te dejo una cosa abajo para compensarte, ahora no me da tiempo).
Mientras, cuando puedas, escucha el tema de 30 seconds por favor, lo puse justamente para que nadie se quedara con regusto tristón.
The show goes on NURIETA, ánimooooo ... Muaaaaaaaaaakksss!!!
No me haces llorar. Me haces sentir. Es eso. Estoy bien, no te preocupes.
EliminarEres tan genial... Un besazo.
No creo que nadie esté preparado para ver llegar a la muerte, una cita a la que todos acudiremos y siempre pensamos nos encuentre al menos de manera amable, así casi sin aviso como un sueño. Yo al único entierro al que he ido es al de mi padre que se fue apagando poco a poco y al mismo tiempo repentinamente.
ResponderEliminarMuy sensible pérdida la de nuestra querida Marina.
Besos dulces.
Yo creo que es difícil DULCE pero creo que sí, creo que hay gente para todo y preparada para todo, más que nada porque se lo curran, nada es por que si. Algunas veces me pregunto por qué dedicamos tanto tiempo a prepararnos para mil cosas absurdas y tan poco para lo que más importa que es a aceptar que hay dolor, pero no tiene por qué haber tantísimo sufrimiento...
EliminarLa muerte es dolorosa por lo que supone de separación física, es así y eso no tiene arreglo, ahora bien, sufrirla como una tortura desgarrada e insuperable o como algo tan natural, depende de la aptitud que se adopte y de los motivos que encontremos para salirnos de la espiral del dolor en su escalada por el sufrimiento..cuando te dan un golpe te colapsas, seguir ahí encogido, doblado y recreándote en el sufrimiento o tomar aire e ir respirando poquito a poco hasta que pasa, son las dos opciones que tenemos para elegir. El tiempo siempre ayuda, si nos dejamos ayudar.
Sí, es verdad, pero ya sabes lo fuerte que es MARINA, es un ave Fenix de libro:))
Otro beso muy dulce para ti y muchas gracias.
Llegamos hasta aquí para un día irnos. Y nos lo cuentan y lo sabemos desde bien iniciado el viaje.
ResponderEliminarLa manera de aceptarlo ya depende de cada cual, según su sensibilidad y manera de afrontarlo, según los días y llegados los momentos.
Lo demás es tránsito, y cada uno lo lleva también como mejor le parece o puede llevarlo y bajo su propio prisma.
Hoy un beso grande y un gran abrazo, María.
Tienes mucha razón EVA,
Eliminarde hecho es lo único cierto que sabemos, que llegamos para irnos, pero...somos tan olvidadizos que por eso a veces vivimos todo con ese tremendismo tan tremendo, suponiendo que nos va a vida en mil cosas que si nos paráramos a pensar no importan nada de nada. La teoría la sabemos perfecta, aplicarla cuando toca es lo difícil para todos. Si viviéramos de verdad la vida como un tránsito no nos agarraríamos a las cosas como lo hacemos... aquí vamos de prestado, pero como tú dices cada uno es él y sus circunstancias, su sensibilidad y su momentos, su prisma y su periscopio:-)
A veces lo fácil lo hacemos difícil y lo difícil fácil.
Fíjate, mi madre es así, hace lo imposible y lo súper fácil le es imposible:))
Otro beso grande para ti bonita, mil gracias.
He leído y releído .
ResponderEliminarHay frases antológicas en el escrito. Muy buenas. Son aquellas cortas que entran deprisa y hacen el efecto de inmediato, como el buen wuisky que no marea.
Los recuerdos y las cenizas se expanden con el viento
La cantidad de propiedades que acumulamos es directamente proporcional a los conflictos y problemas que sufrimos
Sobre los entierros : Me gustan tan poco como los carnavales.
. Debe ser la única mujer en el mundo que hace una fiesta el aniversario de la muerte de su amor.
Un abrazo. Te entiendo perfectamente, quizá porque no he tenido la oportunidad de tener un padre que valiera la pena.
Salut
Qué ilusión me ha hecho que veas esas cosas en estas letras MIQUEL, muchísimas gracias.
EliminarTómate toodos los whiskys que quieras, barra libre :))
¿Sabes una cosa? lo más admirable de la gente como tú para mi, a las que la vida le ha privado de crecer al lado de un padre y una madre como los que yo he tenido la suerte de tener, es justamente que a pesar de los pesares habéis salido gente genial. No importa lo que a uno le falte si por el camino sabe ir recolectando. Siempre he pensado que hay recolectores vitales y aniquiladores, tú eres de los primeros, cuando leo tus recuerdos en letras siempre tengo la sensación que te has guardado la parte hermosa de lo horrible. Eso es admirable. Eres admirable.
Un beso enorme MIQUEL, te prestaría a mi padre un rato si pudiera de verdad, pero con vuelta ¿eh? :)
Un abrazo enoooorme María,
ResponderEliminarHoy me has llegado directo al alma con tu entrada. Demuestras una gran fortaleza interior, parándote y analizando toda la situación minuciosamente y también expresas que tienes un corazón enorme por la descripción que haces de toda la situación. Yo llevo muy mal esto de las muertes. La última ha sido la abuela de mi mujer, hace apenas un mes y medio. No me gustan las muertes, y por ello es como si cerrara los ojos y quisiera hacer ver que nada ha ocurrido. Sé que puede que resulte infantil, pero lo cierto es que así lo vivo y trato de disimularlo lo mejor que puedo. Si he de ir al velatorio, voy, si he de ir al entierro voy, pero en mi interior desearía no hacerlo. Es un terreno en que me muevo muy torpe y con gran incomodidad. Nunca sé si hago lo correcto o no en estos casos. Me asusta pensar en la muerte de un ser mucho más allegado (padres, hijos, hermanos...) Casi prefiero evadirlo y no pensar en ello.
Por cierto, que gran mujer parece tu madre por lo que cuentas de ella. Me he imaginado la escena, y corta la respiración.
Supongo que de tales palos, tales astillas...
Un beso enoooorme María.
Por cierto, estoy de nuevo por aquí.
Mmmm qué alegría me ha dado saberte por aquí de nuevo comandante YJ jaja
EliminarNada de fortaleza, ten en cuenta que hace 10 años que falleció mi padre, si me ves ese día e incluso cómo me ponía con solo escuchar su nombre durante los primeros años, daba pena verme. Tardé no se cuanto en poder hablar de esto sin morirme de pena. Lo que no fuí capaz de asimilar fue el no haber podido estar con él, no saber lo que le iba a ocurrir. Adoraba a mi padre, una de las personas que más he querido y querré en la vida, que me lo robaran por sorpresa fue un zarpazo durísimo para mi. Mi madre sí que es una campeona, lo fue ese día y respecto a lo bien que ha llevado su ausencia lo ha sido siempre desde entonces, a veces aun hoy me parece increíble. Teniendo en cuenta no solo su amor envidiable, es que no se separaron ni un solo día de su vida. Nunca. Creo que siguen juntos a su manera, sé que mi madre lo vive así y yo ahora.. intento imitarla:))
No creo que seas nada infantil por imaginar que alguien que se fue sigue aquí, no lo creo en absoluto. Todo lo que nos haga sentir mejor no es de ser infantiles, al contrario, creo que demuestras mucha inteligencia. Siempre he pensado que mejor que tener inteligencia de la de acumular datos ( que no te ayuda nada a ser feliz y es li que importa) es la inteligencia emocional que para mi consiste en esto que haces tú, colocarte en una realidad más cómoda que no es ser ciegos e insensibles a lo doloroso, no...es salirnos del sufrimiento que genera, que es diferente. Te comprendo tan bien con lo mal que llevas lo de los entierros que además de porque en general veo mucho de teatro y mero acto social, otro de los motivos también es que me contagio muchísimo de la pena cuando la siento tan cerca, no voy a los entierros pero intento ir al tanatorio, ahí puedes abrazar y sentir de cerquita, pero es terrible eso, ver a la gente sufrir a mi me mata, yo sí que soy una infantil sin remedio:))
Un beso inmeeeeeeeeenso de grande para ti y mil gracias, en un momentito me paso a aparcarte lo que queda de nuestra aeronave jaja no te asustes, está un poco abollada y perjudicada pero aun vuela jaja .. que bieen que volviste ;))
Cambian los disfraces. Eso estuvo muy bien.
ResponderEliminarHay un punto, creo, en el que es mejor irse. O por lo menos venimos a eso, parece.
Hacerlo en paz
relajadamente sin llegar a ver los monstruos, que dicen.
Calculo que es como tirarse a una pileta negra que no tiene fondo.
Es malo llorar a los muertos
lloramos por nosotros mismos y hay que dejarlos ir.
Es bueno lo de los pleitos
mi suegro es de asturias
se vino a la argentina por hambre
y el pedazo de tierra que quedó allá ahora es campo productivo y se lo ha quedado un tal cesar
y los otros, que quedaron allá, están que trinan y meta pleito
al cesar lo que es del cesar
para lo que le va a servir
el dia en que este como la madre de tu amiga...
y seguro que ninguna María
vendrá a verlo
como un duende que sos, seguro. No tendrá esa suerte.
Dicen que cuando morimos visitamos a todos, porque no entendemos bien lo que nos pasa
por eso no tiene sentido ir a llorar en público, lo siento como algo intimo y privado.
abrazo María
Creo GARRIGA, que este es el comentario más bonito de cuantos me has regalado, muchísimas gracias.
Eliminar“ Es malo llorar a los muertos lloramos por nosotros mismos y hay que dejarlos ir “ Tienes razón y ¿sabes lo más curioso? cuando consigues dejar de llorarTE, cuando por fin dejas que se vayan, en ese instante, se quedan para siempre contigo... almenos es koque yo siento.
Jaja conozco a muchos César. En Galicia aun hay emigrantes que en Asturia. Pienso como tú también en esto... que ese César se quede con todo, sus hijos no le lloraran cuando haya muerto, se pelarán por lo que él ha robado, los hijos de sus hijos heredarán ese odio y ní jaja.. te lo aseguro, no pienso ir a verle nunca jamás :))
Bueno he de confesarte que no me gusta nada que me vean llorar, pero se me escapa tanto que sí me han visto. Apuesto a que a ti Jordi también te ha visto llorar y sin apostar ( porque gano seguro :-) él, te llorará muchísimo cuando le faltes, pero te dejará ir y tú volverás con él... seguro que encuentras la forma :))
Un beso muuuy grande... sos un sol:))
lloro mucho, María y un día jordi me dijo, "los papás no lloran, retan"
Eliminarja
Entiendo a tu madre : creo que el mejor tributo que le puedes devolver cada año de su ausencia es que aun lo recuerdas y lo celebras; por todos los que has vivido con plenitud.
ResponderEliminarUn beso enorme preciosa .
No BERTHA cielo, mi madre no recuerda a mi padre, vive con él aunque no esté, esa es la única explicación de por qué está como está aunque parezca que él no está... a mi me ha enseñado a hacer lo mismo, aunque he tardado un poco y me ha costado lo mío en aprender. Mi madre hace una fiesta para que nadie se olvide de él, ella jamás le olvidará... si yo te contara ;)
EliminarCreo que hay gente que no se va jamás, al menos no del todo, te aseguro que mi padre es una de esas personas. Vivió como a mi me gustaría vivir, de pie, pero agachándose cuantas veces hiciera falta para agarrar al que se hubiera caído, por eso no he escuchado hablar mal de mi padre, a nadie jamás. Se nota lo orgullosa que estoy de ser su hija ¿verdad? jaja muchísimo.
Otro beso enooorme para ti bonita y mil gracias.
...pues aun la comprendo más, a mí ,me pasa lo mismo con una persona que hace cuatro años que solo se ha ausentado...
EliminarBesos y aprovecho para desearte un feliz fin de semana preciosa
Dale recuerdos a esa persona de mi parte bonita .. seguro que la tienes a tu lado, si es lista no se despegará de ti ;))
EliminarMil besos y también muy feliz finde para ti BERTHITA, graaaciaass.
María te mando un gran abrazo cargado de cariño, los seres más queridos también nos dejan más pronto o más tarde pero nunca se van del todo, están en nuestro corazón.
ResponderEliminarOtro abrazo enoooorme para ti SAU y mil gracias por acercarte y dejar tus pinceles.
EliminarTienes razón, jamás se van del todo mientras les recordemos y vivan en nuestro corazón, es cierto.
Muaaakkkssss!! feliz noche SAU.
Algunas muertes, tan penosas como inevitables, desconfiguran el mundo en el que vivíamos. Nada será igual, aunque todo siga igual. Algunas pueden hacer que toda la existencia pierda sentido. Hay personas que en forma inexplicable y milagrosa, logran entender en el corazón lo que es incomprensible a la mente. Los que no tienen esa suerte, los que no son tocados por ese don divino de la aceptación, intentan calmar el alma a través del entendimiento, y si bien los instantes de dolor no son propicios para la filosofía de vida, a veces abren puertas que de otra manera permanecerían cerradas por siempre.
ResponderEliminarUn beso muy grande y siento mucho este momento tuyo.
La forma en la que mueren algunas personas desgraciadamente sí que es evitable, RICK, el morir es lo inevitable cuando toca. No sé si desconfiaran el mundo todas las muertes, mi mundo cuando murió él no se desfiguró, desapareció. Literalmente fue así, durante unos días no había mundo, a mi no me parecía que lo hubiera. Luego esa sensación pasó. No es igual tienes razón, pero ahora es mucho más parecido a cuando él estaba, he aprendido a sentirlo aunque no le vea y con eso me vale. Quizá en el caso de mi madre sí que sea de esas afortunadas que disfrutan de ese don divino del que hablas, yo no... pero he aprendido a que aquel sufrimiento de cuando se fue desapareciera, supongo que sí tienes mucha razón, gracias al dolor de entonces aprendí muchas cosas, sobre todo a no sufrir por sufrir, eso no ayuda a nadie, simplemente hace daño y lo que nos hace daño no sirve para nada, así que... fuera ;))
EliminarNo sientas nada RICK, te lo agradezco mucho pero estoy muy bien, solo fue un momento en el que se me mezclaron muchos recuerdos en la cabeza, pero ya pasó.
Muchísimas gracias, de corazón y un beso muuuy grande ara ti.
..........................oooOooo..............................
ResponderEliminar¡¡¡ Un beso muy grande y mil gracias a todos !!!
Que nadie se ponga triste por estas letras por favor, no era mi intención contagiar eso, solo mi cariño y recuerdo por algunas personas muy queridas para mi. Están, por su puesto que siguen estando. Nadie se va mientras le recuerdas. De hecho yo hablo montón de veces con mi padre ( y no estoy chiflada del todo conste, solo un poco:-) no sé si me escucha o no, pero me gusta hacerlo.. como si hablara por tlf con él, pero sin marcar número... linea directa:)
Solo tengo un segundito, así que si me dejáis ... este comentario es para mi padre.
Veréis, acabo de enterarme que en abril viene un violinista genial a Galicia -él tocaba el violín ( horrible por cierto:-) pero le encantaba la música, cantaba genial, eso sí. Lo mío con la música es genética pura- así que para que disfrute un ratito él y todos, de paso por si alguien quiere escucharle en vivo y en directo que sepáis que el 12 de abril ARA MALIKIAN, el mejor violinista clásico menos clásico que existe, actuará en Vigo. Meeencanta este hombre. Además de interpretar como los ángeles, está a las antípodas de ese formalismo encorsetado y serio con el que siempre imaginamos envuelta a la música clásica, lo mismo toca con la filarmónica de Viena que con Radiohead. Estoy segurísima que a mi padre le encantaría.
Nada de cara largas xD! lo de mi padre hace 10 años que pasó, esto solo fue un fogonazo de recuerdos que me dio... nada más :))
Aquí os dejo unas sonrisas de violín, de un violín genial.
Nos vemos allí papá, tú y yo vamos seguro, seguro ¡vas a alucinar! :))
Hasta luego!... vuelvo prontito.
¡¡ BUEN JUEVES PARA TODOS !!
....................oooOooo..................
Cariño mío... llego hasta tu "casa".. con "resaca carnavalera" (ya ves.. para un día que salgo... qué excesos)... y me encuentro tu // NO LO SÉ... ALGO...//.. Sabes mi niña?... hoy me he acordado de ti especialmente, al leer que ha fallecido Leopoldo María Panero.. y al llegar aquí y leer tu entrada... me ha parecido una extraña casualidad..
ResponderEliminarAntes que nada... quiero enviar a Marina un beso enorme y abrazos de energía sentida con el corazón... y a tu Maru.. un Bo viaxe...
A tu padre... un guiño de simpatía y alegría.. porque es lo que transmiten tus palabras cuando me has hablado de él...
En los últimos meses.. he pasado por diferentes "estados".. incluso el de tu madre en el funeral de tu padre... he divagado tanto con la mente como con el corazón... y al final... me he dado cuenta... que olvidaba mi alma...
Aquí.. ante tu gente .. (perdones si molesto...).. digo.... que va perdiendo importancia en la vida... la conciencia que mi cerebro crea e involucra a mi corazón.. .y ha comenzado a ganar peso y sentido la CONCIENCIA DE MI ALMA... esa que siente... huele... toca ... oye... vibra... sin necesidad de este envoltorio físico... si... desde que el enfoque se ha trasladado a "los 21 gramos" (así dicen pesa el alma)... todo resulta más llevado... hay más luz... menos preocupaciones... y una gran seguridad... el final... trae el principio... como cuando cumples un año más... añades aunque pierdas..
Lamento no saber explicarme mejor... querría que pudieras entenderme.. leer... dentro de mi.. y traspasar esta sensación .. ¿loca? puede ser... pero últimamente... compruebo que ser razonable no es la mejor opción... te "canean" por todos lados.
Besazo inmenso a todos... por el reencuentro!!!
flor-i
Si vieras la alegría que me ha dado leerte mi querida FLOR.
EliminarSiempre, esta vez mucho más. Meeencanta como suenas. Te sienta de maravilla a ti la resaca carnavalera cielo ( a debido ser que como ibas disfrazada de bebé, has vuelto a sentir como ellos jaja ya me estás mandando fotos) ¡qué bieen te ha sentado! Voy a enmarcar este comentario tuyo para que lo cuelgues en tus paredes y recuerdes el instante en que lo escribiste cuando se te olvide, aunque noooo se te va a olvidar ¿verdad que no cariño? :-)
Es un honor inmenso que me hayas asociado con LEOPOLDO MARÍA PANERO . Son tantas y tan extrañas las casualidades con las que nos sorprende esta vida. Conocí a su hermano sin saber quien era, luego le conocí a él, por su hermano y ahora que recuerdo la muerte de mi padre, se muere él. Seguro que será una tontería, pero tengo la sensación que como siempre vivió queriendo morirse, seguramente ahora esté más vivo que nunca en su vida. ¿Sabes lo que me gusta pensar? que por fin está con el amor de su vida que nunca vivió, ANA MARÍA MOIX , que para remate de casualidades falleció seis días antes que él y que sin saberlo o sí a hora yo les junto aquí, porque esta es la magia, todos estamos unidos por palabras y pensamientos aun sin saberlo.
No me digas que no es todo alucinante. Como el guión de una obra de teatro inmensa y extraña en la que ni los personajes saben que lo son y aun desconociendo el texto van representándolo con precisión milimétrica.
Estoy segura que Maru ha tenido un bo viaxe y que MARINA agradecen un montón tus besos. Tu no la conoces a ella, ni ella a ti, pero a ambas os he hablado de lo mucho que os quiero a las dos ¿te das cuenta? otra vez se repite lo que te comentaba antes. Personajes, no, mucho más, protagonistas que intervienen en una obra sin saberlo si quiera pero que se representa a cada instante. Por eso nunca comprenderé cómo algunas personas se sienten solas, estamos tan pero tan acompañados siempre que a poco que pensemos un instante mereceríamos una buena zurra cuando lloriqueamos sintiéndonos solos. Todos viajamos juntos en esta nave intersideral en forma de mota azul por el universo, todos formamos parte de esta tripulación inmensa con la que nos cruzamos a todas horas sin enterarnos si quiera, sin saber que estamos en la vida de miles de personas a las que aun sin ponerles cara, nos llevan en sus mentes sin saberlo.
Y ahora llegas tú feliz y sonrío no sabes cómo al leerte que te sientes más segura, menos preocupada ¿loca? jaja bienvenida al club bonita, hay que estar un poco locos para vivir, estoy convencida que los súper cuerdos se lo pierden todo, así que hace mucho que loqueo más contenta que unas castañuelas por la vida y por eso estoy segurísima que también sonríe mi padre con tu guiño y te lo devuelve. A lo mejor ahora él está echándose unas parrafadas con Leopoldo y le cuenta que mi abuelo descendía de Astorga como él y que mejor se toman un cocido maragato, total! ya no les puede subir el colesterol jaja
Ayyyy Sr!! qué locura me está quedando esto (mejor ni releo o me va a pasar como con esta entrada que si me lo pienso mucho ni la hubiera subido:-) pero mira jaja a decir verdad me importa tres jaja eso sí, como vuelvas a escribir que molestas te doy jaja que lo sepas. Jamás molestas FLOR, las flores jamás molestan, muchísimo menos tú que eres una de las más bonitas que he tenido la grandísima suerte de oler, así que déjame disfrutar oliendo de tus letras y hoy o mañana, cuando podamos (pronto, pronto) nos escuchamos y ...(pronto, pronto ¡ojalá!) nos vemos ¿vale cielo?
Tooodo mi cariño y miles de besos volando hacia ti FLOR, mil gracias preciosa.
... Muchísimo besos para todos.. ellos saben llegar a donde haga falta :))
Mi querida Maria
ResponderEliminarLa muerte, sea de quien sea, humana, animal o vegetal, siempre sera triste... y aunque es lo unico que tenemos asegurado, creo que nunca estamos preparados para ello.
Pues nada, no me pongo triste ni te quiero triste a ti ni a nadie... simplemente no vale la pena, pues el llanto y la tristeza no resucitan a nadie ni cambia la realidad, creo que ante tales circunstancias, lo mejor que podemos hacer es interiorizar esa realidad y darle tiempo al tiempo...
Besos mi querida Maria!
Es verdad REBELDE, inevitablemente son tristes los adioses de los seres queridos, los adioses en general, muchísimo más cuando hubieras deseado estar para decirle hasta luego y ni siquiera te dieron esa oportunidad. No te preocupes cielo, no estoy triste, he tenido 10 años para acostumbrarme a que esté sin estar. Aquí se me mezcló el recuerdo de cuando lo estuve, mucho, muchísimo, pero ya no... solo que soy muy llorona, ya sabes :))
EliminarMil gracias bonita, un beso grande y feliz finde.
Mi padre murio de repente hace poco, no llore en público... en casa si, le recuerdo casi todos los días...
ResponderEliminarLo sé TEMU y lo siento mucho, pero al menos tú estabas cerquita de él. Seguro que viviste sus tres últimos días. Mi padre estuvo ingresado tres días en el hospital antes de morir, no lo sabía y no estuve allí. Creo que saber eso me mató, más que su muerte... Entonces. Esto solo son coletazos de los recuerdos de aquello. Ahora ya pasó.
EliminarUn beso grande ( me alegra saber que lloras, eso te hace más fuerte de lo que sé eres:))
Mari,
ResponderEliminarme has hecho llorar....esto no es una novedad soy un llorón. Pero yo tengo la misma percepción de ese día. A nuestro padre lo recordará mucha gente, porque como tú era soñador, soñaba un mundo mejor en el que poder aportar y no del que poder beneficiarse. Yo no iba a los entierros tampoco. Sólo a los muy cercanos a los imprescindibles. Ahore desde que murió papá procuro ir a todos los de aquelas personas que aprecio o son familiares directos de ellos. Porque cuando murió papá también sentí su calor y eso como una buena escalada no se olvida nunca.
Te quiero
Yo también, mucho. Lo siento cielo, debí avisarte de este arrebato que me dio. Te llamo esta noche y hablamos. Muaaaaaaaaaaaaakkss!!
EliminarQuerida neniña,
ResponderEliminarTe diré que hoy tus letras me han tocado muy dentro, al tratar de algo universal que a tod@s nos concierne. Siento eso que sientes tú al acudir a entierros (in situ o en la distancia) y...
La muerte siempre ha sido una sacudida para mí; como una brecha que atraviesa las seguridades resquebrajándolas y hace sonar una campana de atención poniéndolo todo patas arriba. Mi mayor crisis existencial tuvo que ver con ella: si todos vamos a morir ¿qué sentido tiene esto?
La muerte que más me impactó fue la de mi primo, de 33 años. En el entierro vi a mi padre llorar. Sólo lo he visto llorar dos veces. Pero lo peor era lo que decía sin darse cuenta... Nada tenía sentido entonces, ni para él ni para mí. Después recuerdo la muerte de mi tía. Una mano. Recuerdo su mano inerte, pero no lo voy a contar. Y otro tío más, muy cercano...
Contaría también el momento en el que todo cambió y empezó a tener sentido para mí, pero no lo sabría explicar. En un instante -sin darme cuenta- todas las piezas encajaron. Soledad, sinsentido y muerte perdieron gran parte de su oscuridad. La náusea desapareció. Algo en mí empezó a mirar cara a cara a estos jinetes del apocalipsis, desvaneciendo sus sombras. Aun así, la muerte me sigue afectando. La de una madre, la de un padre, tiene que ser terrible. ¿Y qué me decís sobre los sentimientos de culpa que a veces acompañan a las muertes de seres queridos? De esos también he tenido unos cuantos. La culpa. Qué cosa más inútil es la culpa. Los sentimientos no se deciden y si se tienen, es lo que hay. Las cosas son como son y no deberían ser de otro modo que encaje en una imagen que hayamos creado, donde pensemos que deberíamos encajar; o peor todavía, donde los demás piensen que debemos encajar. No somos una imagen. Somos personas complejas, con sentimientos complejos y a veces contradictorios... y está bien así. Hacemos simplemente lo mejor que podemos con lo que hemos aprendido. Todo está bien. Es lo que creo.
Una vez me ocurrió lo siguiente (¿vendrá esto a cuento?): estaba en un periodo intensivo de meditación; llevaba días sentado, inmóvil, sin hablar, con todos mis fantasmas rodeándome. A mi lado había muchas personas más, inmóviles, con sus propios fantasmas. En un momento dado me empezaron a doler las rodillas. Un dolor atroz debido a la inmovilidad de tantos días sentado frente a mí mismo, sin poder escapar. El dolor fue in crescendo, cada vez mayor. Estuve a punto de levantarme y decir "hasta aquí hemos llegado, esto es puro masoquismo"; pero un pensamiento cruzó mi mente como un relámpago: "podrás escapar de este dolor, pero por mucho que corras no podrás escapar de otros que están por llegar... la muerte de tus seres queridos... tu propia muerte". Así que me quedé allí y me rendí al dolor. Y justo en ese momento ocurrió algo extraordinario: al rendirme por pura desesperación al sufrimiento que estaba viviendo en ese instante, mi cuerpo se relajó de golpe en forma de desplome muscular. Seguía erguido, con la espalda muy recta, pero todos mis músculos se soltarón y sentí como si me hundiera cinco centímetros en el suelo a pesar de que no me había movido. De repente el dolor dio paso a un huracán de delicia física y también mental. Un instante antes me moría, y ahora sentía que estaba en el paraíso. A veces nuestra resistencia a la vida se convierte en nuestro mayor dolor...
En ese momento sonó la campana. Fin del periodo de meditación. Me levanto como una flecha, como si me acabara de sentar. Estoy fresco como una rosa con el rocío de la mañana. Por el rabillo del ojo veo como el compañero de al lado no tiene tanta suerte. Se le han dormido las piernas y casi no puede incorporarse... y entonces de nuevo, como un relámpago, me atraviesa su sufrimiento, y con él el sufrimiento del resto de mis compañer@s y de toda la humanidad. Me siento unido a él en lo más profundo y a la salida no puedo evitar tocarlo con la mano. Me mira sorprendido porque estoy rompiendo las reglas. Sonrío y bajo la mirada al darme cuenta de que he empezado a llorar sin ningún motivo...
A veces, cuando leo o escucho a gente como tú, mi querido J,
Eliminarpersonas que recuerdan que en algún momento de sus vidas, algunas así siempre viven -sé que no es tu caso- con esa terrible sensación de ver la muerte como un final amenazador, como un... ¿para qué vivir si todo terminará tarde o temprano? me doy cuenta de lo afortunada o inconsciente que he sido. Nunca me he hecho esas pregunta, no lo he necesitado y por eso no he sufrido al no saber la respuesta.
Para mi lo único terrible de la muerte es lo que tiene de despedida, de no volver a ver a quienes quieres, de ¡adiós! Respecto de mi misma, solo me asusta si duele mucho mientras llega, nada más que eso. Lo que hay después no me preocupa nada. Para mi la vida es en sí misma la respuesta a todo lo que necesito saber mientras la vivo, dure lo que dure, no importa.
Y sí, tienes mucha razón, es verdad que hay mucho de sentimiento absurdo de culpa en todo lo que rodea a la muerte y a la vida en general. Mira, de esto sí que he pecado muchísimo. Me siento culpable por tantas cosas que puede ser que por eso no me haya preocupado nada lo que ocurre cuando nos morimos, no de pende de mi y lo que no depende de mi no me hace sentir culpable.
Una de las cosas que más daño de hizo cuando supe que mi padre había muerto, fue la culpa que sentí, la terrible culpa de no haber estado a su lado. Sentir que yo estaba tan feliz mientras él sin yo saberlo se estaba muriendo es algo que se me hizo absolutamente insoportable. Es algo aun hoy que no sé si podré perdonármelo a mi misma. Es verdad que nadie me avisó, pero yo no llamé durante esos tres días que pasó en el hospital antes de morir y eso, me hizo sentir terriblemente mal. Por eso al saber lo dulce y en paz que fue la muerte muerte de la madre de Marina, saberla a su lado hizo que todo esto viniera a mi cabeza, sé que fue por eso... todo aquello se me revolvió dentro de nuevo y salió aquí de esta forma.
Es preciosismo esto que cuentas ( sí viene a cuento ;) esa capacidad tuya de sufrir aguantando el dolor hasta que tu cuerpo dejó de luchar, se rindió y quedaste en paz, jo! qué envidia saber que alguien es capaz de algo así. Yo no tengo ninguna capacidad frente al dolor, lo soporto pero no controlo absolutamente nada, soy un trapito absolutamente, me deshago sin más. Pero con todo lo admirable que me perece eso muchísimo más aun ese mimetismo y súper empatía que sentiste al ver el sufrimiento de tu compañero. Creo que esta parte es la que no sé por qué no suele sentir la gente en general. Si sintiéramos el dolor ajeno como propio, nadie sería capaz de hacer daño a otro ser. A ninguno. Ni humano, ni animal, ni vegetal. Esta incapacidad de sentir lo que sienten los demás, de ponernos en su lugar es la madre de todo el mal que se hace a otros seres pasando del sufrimiento que les generamos. Mil gracias por contar algo así.
Y como tienes a MARINITA abajo ( espero que estés tranquilo por ella. Yo lo estoy... sé que es la persona más fuerte y valiente que conozco y por eso sé que está bien, dentro de todo.. la sé tranquila) aquí lo voy a dejar ya. Mi madre te adoraría si te escuchara lo que le has escrito aquí para ella ( yo se lo contaré :) sinceramente me siento muy orgullosa de ella por ese día y todos respecto a lo bien que llevó la muerte de mi padre. También por ese esfuerzo suyo porque a través de esa fiesta que hace, nadie le olvide olvide. Ahora la entiendo, me costó mucho, nadie sabe lo que lloro yo ahí jaja pero al menos ahora sé por qué lo hace. Solo que yo no necesito ninguna fiesta, lo recuerdo cada día. Fue el mejor padre que nadie pueda desear y no es amor de hija, es así. La mejor persona que he conocido jamás en todos los sentidos.
Tu otra J, otra persona genial que esta vida me ha dado la infinita suerte de conocer, muchísimas gracias de corazón.
Un beso muy grande para ti mi querido duente.... nos podemos morir en paz después de esto ¿verdad? :-)
... Otro beso y otro más para mi querida MARINA y para todos.. hoy y siempre.
Si hay un motivo para el cariño y la complicidad, debe ser éste: todos vamos en el mismo barco; nuestros sufrimientos son los mismos; nuestros torpes intentos de evitar el dolor siguen los mismos modelos. Todos estamos unidos en esta tragicomedia y la resistencia a lo que nos acontece y el miedo que conlleva, nos mata mil veces antes de morir. Más que a la muerte, deberíamos temer a no conocer la vida, ni tener el valor...
ResponderEliminarUna vez tuve una visión: una cascada de agua fresca y pura cayendo desde la altura de forma natural, sin ningún obstáculo. A veces una imagen dice más que mil conceptos dispuestos en perfecta coreografía. Además el cuerpo entiende las imágenes, no así los conceptos, salvo los más básicos...
La luz de la tarde pasó, llevándose lo que se podía llevar; y yo espero que estés bien... y te sigo abrazando.
Y sobre ti, querida neniña, te diré que el relato de lo que hizo tu madre en el entierro de tu padre me cortó la respiración. A veces un pequeño gesto contiene tanta sensibilidad e intención que cuando me atraviesa casi no lo aguanto... Percibirlo así ha sido precioso... Tocado. Adoro a tu madre. Es un detalle sencillamente encantador, como celebrar todos los años su vida el día de su partida. Cada uno expresamos lo que sentimos a nuestra manera. Hoy tú lo has hecho con una sensibilidad a flor de piel, y ya no sé si has sido tú la que me has atravesado, o tu madre, o las dos... o la vida y la muerte a través de tu voz y tus letras.
Ah, una aclaración: no sé si parezco triste al respeto de todo este asunto de la muerte y demás, pero ni lo estoy ni lo soy (triste). En realidad creo que no hay separación entre la muerte y la vida, y creo también que la primera hace a la segunda mucho más intensa. Todos morimos a cada instante y renacemos de nuevo. La realidad es así y es una asombrosa maravilla :o) .
¡Y pensar que hoy sólo iba a enviar un abrazo guardando silencio!
Eso es lo que me pedía la primera lectura... en fin: ¡No tengo remedio! jajajaja
Un beso con todo mi cariño a las dos (que se extienda a otr@s también, presentes o "ausentes")
Y yo te digo que estoy bien...pero sigue abrazando.
EliminarUn beso JDMV ;)
Pues lo he soportado, María. Enterico y de pe a pa. Y he descubierto en cuantas cosas te pareces a mi, o yo a ti. Yo también me peleo por los espacios y sobre todo por el tiempo. Nuestro tiempo es nuestra vida y no permito que nada ni nadie me arrebate el tiempo que me toca vivir.
ResponderEliminarY por el agua, Es hermoso pelearse por el agua. Si el agua también es nuestra vida, cómo no pelearse por ella.
Y así podríamos seguir, María.
Te abrazo mucho.
Si te digo obviedades, pues tú haces dos cosas: sonríes y me dejas hacer, total siempre me querrás más, ya no lo discutiré jamás.
ResponderEliminarDecirte gracias por tus palabras etc etc, sería como no decirte nada porque, au8nque son ciertas, en estos días las he repetido hasta la saciedad…siempre ciertas…siempre perdiendo peso…
Verás mi Mery. Lo más difícil cuando tienes una pérdida, una muerte, la ausencia de alguien a quien adoras, como el caso de tu padre, lo más difícil es dejarle partir. Y tú dirás: Hombre claro. Pero no es tan claro, porque tú no dejaste que tu padre se separase de ti aunque ya no le tenías físicamente. Hay momentos y personas que se van de nuestro lado con menos trauma, con menos pena, es así, aunque no quede bien decirlo, menos pensarlo y mucho menos sentirlo. Hay muertes durísimas, hay muertes absurdas, muertes dolorosas y muertes esperadas o anunciadas…pero solo para el que se queda, el que se va, simplemente deja de respirar y ya nada siente, nada padece y nada le duele. Por eso somos nosotros, los que nos quedamos, quienes debemos dejarles partir, así, como es la vida, una sucesión de idas y venidas sin que podamos hacer nada por evitarlo.
Hoy me ha dicho un amigo, que a veces me cuida el alma, que las muertes se pueden llorar antes y que luego después ya no se lloran. Esto tan fácil de decir es complicado de entender. Yo ya lo entiendo y hoy para mi todo cobra sentido.
Yo entiendo a tu madre y no sabes cuánto y entiendo que haga una fiesta pare recordar a su marido adorado. ¿Por qué el recuerdo de alguien fallecido tiene que ser siempre triste y doloroso? Tu madre recuerda todo lo bueno que le dio, todo lo excelente que vivieron juntos y lo recuerda de la forma que fue su vida con él, alegremente. Y ella sigue con su vida, una vida diferente después de su partida, pero su vida. Tu madre y yo no tenemos seguramente mucho en común, pero algún día la conoceré y seguramente nos reiremos juntas, estoy segura.
Respecto a lo de Maru, me parece genial que le digas adiós a alguien que te resulta entrañable.
Y para terminar, mi querida lokita, estuviste conmigo y con tu presencia sin duda, todo el mundo se quedaba mirando tus flores jajajajaja enorme enormísimo ramo colorido y alegre que adornaba el momento fúnebre. Y yo que no soy católica, ni apostólica, ni siquiera romana, dejé tus flores en la iglesia, las tuyas y algunas más, para que adornasen y dieran color a mi parroquia, aunque el cura me dio una pequeña bofetada porque dice que nunca me ve por allí.
Y para terminar, adorada pequeñaja, te diré que eres una presencia en mi vida de la que no voy a prescindir nunca, personas como tú hay tan poquitas que quienes tenemos la suerte de tenerte cerca no pensamos ni por un momento dejarte escapar…y yo te tengo, por muchos que sean los kilómetros que nos separen.
La música….bueno, se puede escuchar mientras escribo, a decir verdad molesta poco ;) jajajajajaa
Un beso mi niña, te quiero por los siglos de los siglos…amén.
Ha muerto Leopoldo M. Panero.
ResponderEliminarTú le rendiste homenaje en vida y te lo agradezco ahora, que por él de ti recuerdo... y viceversa.
Aquí tenemos una idea de la muerte muy arraigada quizás por la cultura religiosa,
ResponderEliminarEso me hizo pensar que quizás sea el motivo porque es el país donde más donante de órganos hay …si es así algo positivo se podría sacar de este acto luctuoso, salud y al bollo….http://youtu.be/4rXZaSGFze4
Te mereces muchos, pero tienes un premio en mi blog :))
ResponderEliminarUfff, vaya tela, María.
ResponderEliminarUn beso.
Menos mal que no me ves...
ResponderEliminarTe reirías de mí.
Me has tocado la fibra.
Y si, me he emocionado.
Que triste para todos.
Un abrazo María.
ResponderEliminarUn beso y un abrazo para ti y para tu padre...
...y otro de parte de mi padre, fallecido también hace unos años...
Lo has expresado muy bien.
Te acompaño en el sentimiento, en tu sentir... ;´)
Mal asunto afrontar las muertes ajenas.
ResponderEliminar
ResponderEliminarPD: Se me ha olvidado... me encanta 'Ara Malikian'. Es genial.
Una magnífica mujer tu madre. A mi también me gustaría que cada aniversario de mi óbito se convirtiera en una fiesta.
ResponderEliminarYo puedo decir que de mi padre pude despedirme, sin embargo, ahora que ha pasado más de un año lo encuentro a faltar. A veces, ante un problema imagino sus consejos, cuando en realidad sé que estoy intentando hablar con él.
Hola María:
ResponderEliminarYo tuve la suerte de estar presente cuando murieron dos de las personas que más quiero en mi vida. Mi Amandrea (abuela) y mi Aita (padre).
Y digo la suerte porque creo que estar junto a las personas que quieres el día que mueren es, a costa de que se me entienda mal, precioso.
Ambos llevaban tiempo enfermos, de esos enfermos sin remedio. No lloré, en ninguno de los dos casos, el día de su muerte porque ya lloré bastante esa muerte segura durante los días anteriores que estuve con ellos. Ver sufrir de dolor a alguien a quien quieres ver como alguien fuerte y lleno de vida se va apagando lentamente, es mucho peor que verlo morir. Porque en ese caso la muerte es una especie de liberación para ellos (eso es lo que yo creo).
Los dos murieron en fechas muy significativas. Mi madre, mis hermanas y yo, vestimos a los dos para la ocasión (ya ves que ironía). Jamás imaginé que tendría valor para hacer algo así. Pero cuando quieres y amas, lo haces sin sentir. Tal vez sus cuerpos estén fríos, pero el calor que dejan en el corazón de los que se quedan, te da la fuerza (a mi por lo menos).
Nunca los he recordado con pena, ni mucho menos. Tengo mil momentos bellos en el recuerdo. Lógicamente, también tengo recuerdos menos agradables, porque el que diga que todo lo que vivió con una persona fue maravilloso creo que miente. Pero creo que la mente es selectiva y al final te vas quedando con lo mejor que te dieron y que compartiste con ellos.
Me enteré tarde de la muerte de la madre de Marina. Tal vez más tarde de lo que me hubiera gustado, pero supongo que como todo en esta vida, hasta las noticias llegan cuando tienen que llegar.
Un beso y un abrazo enormes para mi hada madrina, que debería de saber (aunque creo que duda) que la quiero mucho.
Otro enorme para ti María, porque sé que tú haces que ella se sienta mejor.
P.D. Bella entrada.
A ti por exponer tan abiertamente tus sentimientos un abrazo enorme.
ResponderEliminarelperroverde.
Hola María bonita.
ResponderEliminarDile a Marina que siento mucho lo de su padre. La muerte de un ser querido siempre es algo a tener en cuenta. Para los deudos y para nosotros, y cuanto más pasa el tiempo, más lo sabemos. A tu padre, a quien tanto quisiste, recuérdale ésto, ya que tú hablas con él. Dile que seguimos en la brecha. Como él querría. Y que no desearíamos para nosotros algo que él no hubiese querido. Aunque, en el camino, hagamos daño a quienes amamos. Cuando le digas eso, hazle un guiño, a ser posible de color azul, como esa flor que has puesto al final. Pídele, por último, que nos libre de todo mal y que así sea.
Tu padre tuvo una hija que merecía. Lo sé yo y lo sabe él.
Un beso, María.
Uffff apenas puedo ver lo que escribo ahora, tan emocionada me has dejado....
ResponderEliminarAfortunada tú por los padres que has tenido y madre que tienes...
Perdonarásme que llego tan tarde a leer tu entrada y dejarte comentario,
es que ando que no me alcanzan las horas del día para todo lo
que tengo que hacer o resolver.
No tenía idea de la pérdida de Marina, le escribiré
inmediatamente un correo. Coincido con lo que
te ella dice en el comentario.
Leyendo lo que dices del entierro de tu padre he revivido el entierro
en el Père Lachese de París y duelo tremendo
por mi tío materno y tutor legal, que fue mil veces más
duro y largo, que el que hice por mi padre.Todo tiene que
ver con la significancia que tiene las personas en nuestra vida
y el lugar que ocupan en nuestro corazón.
Un beso y un abrazo muy grandes
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ResponderEliminarPerdóname, no había leído el final de tu comentario.
EliminarLo siento muchísimo de corazón. No sé que decir.
Me temo que no ha sido buena idea escribir esto,
de verdad siento haber removido cosas tan dolorosas.
Perdóname por favor. Un beso.
No te preocupes Maria. tambien me ayudó. es la vida así y todo lo qe sucede nos hace. Sonrio, de verdad. Me supero y sé qe tus palabras son siempre cálidas.
Eliminarun beso..un beso grande
Yo tampoco digo adios
EliminarPuffff María, girando cual torbellino mis sentimientos, caótica mi mente para no variar y sintiéndome bien ¿es posible?, no sé, pero lo has conseguido tu, igual sin intención pero yo no mando en estas cuestiones, me desbordan y no hay nada que hacer, bueno sí, en este caso apreciar cada instante luego puede lleguen las reflexiones y así sera casi con toda seguridad.
ResponderEliminarSi la parafernalia alrededor de la muerte y los carnavales se asemejan mucho, hay una perspectiva que te lleva a relacionarlos.
Mi vivencia cuando perdí a mi padre, no siendo igual es tan tan parecida¡¡¡, ,mi reacción fue de asombro (al menos es lo que mas se parece) y llevabamos tres años esperando el desenlace, iba a durar una semana pero se prolongo, hubo mucho tiempo de despedidas, pero María ninguna me valió, ni me vale...por tanto sigo sin despedirme de él y me va mucho mejor, siempre conmigo, también un tipo muy curioso.
Las fibras que tocaste crean algún tipo de melodía sublime¡¡
Besos muy muy cálidos ♥♥
tRamos
ResponderEliminarLa muerte es algo que nace con nosotros, compañera fiel, espera el momento en realizarse. Siempre lo consigue.
No conseguimos nosotros acostumbrarnos a ella, por conocida que nos sea. Solo nos queda el recurso de compartir el dolor... quien sepa hacerlo.
Marina es fuerte pero tu post le sentará bien... ya la conoces.
· Hoy... PP·VV & BSNGNS
· CR · & · LMA ·
Querida María en esos momentos así tan duros y trascendentales me cuesta sacar las palabras, a no ser que la persona sea tan cercana que la persona abra ese momento tan íntimo para hablar.
ResponderEliminarLa muerte de un ser querido es concebida y sentida de varias formas y maneras y depende en mucho de la cercanía afectiva que haya tenido con nosotros.
También se puede reflexionar acerca de la muerte pero eso requiere de momentos y contextos especiales y eso es precisamente cuando ninguna muerte duela.
Muy conmovedor lo que narras acerca de tus duelos.
Mis condolencias a tu amiga y a sus familiares.
Muchos besos mi querida María.
Presumo de dominar las emociones y apenas recuerdo haber llorado externamente en alguna ocasión, pero esta entrada me ha conmovido. Mis padres murieron jóvenes y su ausencia siempre está presente en mi memoria y en mis afectos. No sé qué más decir...
ResponderEliminarMuchos besos, María
La pérdida de mi padre fue para mi algo irreparable, hace 16 años y no pasa día que no le recuerde. Soy llorona también y no derrame una lágrima y eso que mi padre murió en casa y yo estaba a un lado y mi madre al otro lado. Pero pasados tres meses empece a llorar y casi no paro. Las reacciones son así.
ResponderEliminarSiento esas muertes cercanas de las que hablas.
Un abrazo!!
La muerte de mi padre la viví con un dolor sereno. Estuve a su lado hasta el último momento. Vi su deterioro y eso me ayudó a afrontarlo.
ResponderEliminarUn beso.
Ilduara
Peroooooooooo sino lo sabía ¿se ha muerto hace días la madre de Marina? ¡¡¡¡¡¡¡pero bueno!!!!! ¿y yo sin enterarme? joerrr te juro que me has quedado de piedra, sin reaccionar, resulta que ahora que me estaba poniendo al día con tus entradas, y llego a ésta, y me encuentro con esto... ¡¡helada me has quedado, de verdad!!!!!! no me salen ni las palabras, solo siento a mi corazón me está galopando que ni te imaginas.
ResponderEliminarAhora la enviaré volando un email dándola un abrazo muy muy fuerte.
Es muy dolorosa cualquier pérdida, y más cuando se trata de alguien tan cercano como puede ser una madre, un padre, o persona querida, yo perdí a mi padre hace años y se siente un dolor indescriptible, solo el corazón es el que lo sabe por la herida que queda de dolor, y aunque pasen los años, ahora es más suave y le recuerdo en muchos momentos como si siguiera en vida.
La verdad es que yo lo paso muy mal cuando voy a los entierros, prefiero no ir, porque siempre salgo llorando, soy muy muy llorona, y es imposible, por muy fuerte que me haga, que no llore.
Querida tocaya, te dejo un abrazo muy fuerte, por la pérdida de tu padre, aunque le llevas siempre contigo en tu corazón y recuerdo, las pérdidas son muy dolorosas, y nunca podremos asumirlas, porque no aceptamos la muerte.
MUACKSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS.